domingo, 6 de julio de 2014

TERCER SEMINARIO SOBRE SEQUÍAS EN LA CUENCA DEL JÚCAR

El  25 de junio asistí al seminario sobre sequías en la cuenca del Júcar, que organizaba el grupo de ingeniería de Recursos hídricos del instituto de ingeniería del Agua y Medio Ambiente de la Universidad de Valencia, y ya era el tercero.
La charla comenzó con la visualización de unos mapas del territorio que mostraban una realidad bien distinta a la sequía del 2005, en dicha fecha teníamos una sequía que azotaba las cabeceras del río Júcar mientras que en el Turia la realidad era otra. Actualmente la sequía afecta al Turia mientras que la cabecera de Júcar parece mantenerse alejada de esta situación.
Los primeros en intervenir fueron los responsables de la Confederación del Júcar, su Presidenta, el Comisario de aguas y el Director técnico, y nos aportaron datos bastante interesantes sobre la sequía,  situación en la que nos encontramos y de como se gestiona las mismas.

A nivel legislativo esta gestión viene recogida en el art. 27 de la Ley 10/2001, de 5 de julio, del Plan Hidrológico Nacional, el Ministerio de Medio Ambiente, para las cuencas intercomunitarias, con el fin de minimizar los impactos ambientales, económicos y sociales de eventuales situaciones de sequía, establecerá un sistema global de indicadores hidrológicos que permita prever estas situaciones y que sirva de referencia general a los Organismos de cuenca para la declaración formal de situaciones de alerta y eventual sequía
Con la  declaración  entran en vigor los Planes especiales de actuación en situaciones de alerta y eventual sequía que deben ser elaborados por los Organismos de cuenca en los ámbitos de los planes hidrológicos de cuenca, y que  incluirán las reglas de explotación de los sistemas y las medidas a aplicar en relación con el uso del dominio público hidráulico. 
Los planes especiales de actuación fueron aprobados por la Orden MAM/698/2007, de 21 de marzo pero no se previó ningún procedimiento de revisión de los mismos como se apuntó por parte de los responsables de la Administración.
También los municipios de más de 20.000 habitantes deben elaborar sus propios planes de contingencia ante estas situaciones.
El plan hidrológico del Júcar define la sequía como deterioro temporal de determinadas masas de agua y permite que en  esta situación se rebajen los caudales mínimos excepto la Red Natura.
La importancia de la sequía ha hecho que se le dediquen en el EPTI del Júcar, dos de los temas de esquemas importantes el de fenómenos extremos y el de gobernanza. 
 Y es precisamente dentro de la segunda de las fichas de fenómenos extremos donde se incluye información sobre la gestión de las sequías en la Demarcación; en concreto indican que existen una serie de indicadores que tienen en cuenta la disponibilidad de recursos para atender las demandas de agua de los sistemas de explotación. Estos indicadores posibilitan clasificar la situación de cada sistema en cuatro estados (normalidad, prealerta, alerta y emergencia), permitiendo activar con suficiente antelación las medidas de gestión previstas para minimizar los efectos de estos episodios, bien con la puesta en marcha de fuentes de recursos alternativos o la relajación de ciertas restricciones ambientales.
Teniendo en cuenta estos indicadores y según el informe de  seguimiento de los indicadores de sequías elaborado por la Confederación del Júcar, vemos que el Júcar se encuentra en situación de normalidad mientras que el Turia y Castellón están en prealerta y Alicante en emergencia.
En las jornadas se puso de manifiesto que el haber pasado una sequía como la del 2005 ha supuesto una serie de ganancias además de experiencias y lecciones aprendidas, entre ellas los pozos de sequía y los bombeos, rebombeos y la  reutilización. 
También se destacó la constitución de la Oficina Técnica Sequía el 22 de mayo del presente año así como una serie de actuaciones: la comunicación del escenario de emergencia al Ministerio y a los municipios de más de 20.000 habitantes , programa de Policía de Cauces y  los contratos de cesión de Derechos del Vinalopó que hasta ahora no había precedente.
A continuación intervinieron los demás usuarios invitados el ayuntamiento Valencia por los abastecimientos, destacando como aspectos indirectos de la situación de sequía: el mayor coste de potabilización,  posibles incrementos de coste de agua bruta, mayor necesidad de vigilancia…
Y trató sobre un problema que ha surgido recientemente principalmente motivado por la sequía es el riesgo de incendios, incendios que han sido una realidad en ambas potabilizadoras.
Luego intervinieron los regantes, los de la Acequia Real del Júcar y los de la Comunidad de Regantes de Cullera: por la acequia Real  intervino el Acequiero Mayor contando como se adapta los turnos de riego ante una eventual sequía, sus impresiones a pie de campo eran las siguientes: cuando la sequía se prevé avisas a la gente y hay gente que no planta. A mi modo de ver aquí se produce una situación engañosa para la administración puesto que el mensaje que trasmiten a las comunidades es que se aprueban restricciones y son efectivas sin embargo la consecuencia que extraen algunos  regantes es, si hay restricciones hay sequía  por lo tanto no planto.
Por parte de la acequia de Cullera también se plantearon cuestiones interesantes y en particular los robos de maquinaria, material etc… que sufren sus explotaciones. Ni siquiera con un seguro se puede cubrir estas pérdidas dado que en cuanto tienen que cubrir el riesgo una vez, inmediatamente les dan de baja del seguro.
Interviene en el debate posterior el participante de Agroseguros explicando que esta situación es insostenible para una aseguradora y que solo el consorcio tienen capacidad. Además su exposición resulta muy aclaratoria explica el gran nivel de especialización que ha adquirido el seguro agrario desde sus comienzos en los que se partía de tres seguros hasta la pluralidad que hay actualmente.
Otra intervención que llamó  mi atención fue la del técnico de AEMET con gran sinceridad y claridad explicó que la previsión de la sequía a largo plazo no es posible, evidentemente existen este tipo de predicciones pero aún se  está investigando sobre ellas y cuando se comprueba a posteriori las predicciones y lo que realmente pasó las coincidencias no suelen darse muy a menudo.
Finalmente por parte de IBERDROLA se comentó como afronta la empresa la sequía disponiendo de turbinas de diferente tamaño para aprovechar los caudales menores que se ha regulado en épocas de sequía. También el uso de la regulación de los embalses de Cortes, Naranjero y La Muela para ayudar en la sequía. Incluso la precaución que en su día se adoptó con Embarcaderos, que estando sumergido en la cola de Cortes, está preparado para retener un pequeño volumen de agua para mantener la refrigeración de la nuclear por si bajara mucho el nivel de Cortes.
La última de las presentaciones es  más difícil de comentar ya que me generó muchas dudas y la sensación es que ocurrió lo mismo con la mayoría de los presentes. Se trataba de un proyecto europeo aparentemente dirigido a calificar la gobernanza y en el caso concreto iba dirigido a la Confederación del Júcar, en él se pretendía que a través de unos indicadores de tipo semáforo se simplificaran cuestiones como la siguiente  todos los  miembros de la Confederación del Júcar tienen igualdad en los procesos de  toma de decisiones (Existencia de normativa  para fomentar el proceso democrático). Evidentemente el nivel de inconcreción o amplitud de las preguntas junto con la simplicidad de las respuestas esperadas hicieron que encontrara  de escaso interés el proyecto. 
El seminario concluyó con un intenso debate entre los participantes y el tema central recayó sobre los pozos de sequía, infraestructuras creadas al amparo del anterior proceso de sequía pero cuyo mantenimiento no ha quedado claro por quien debería ser sufragado, si por la administración o por los usuarios. Ante dicha incertidumbre las instalaciones no se han mantenido. 
Como conclusión personal que me queda del seminario es que la puesta en común es siempre interesante y enriquecedora, sin embargo ¿se quedará sólo en una puesta en común?, me gustaría saber si algunas de las cuestiones que se plantean obtienen una respuesta por parte de la administración al menos a medio o largo plazo. 
La sensación que producía el debate era un cierto cansancio sobre las posturas encontradas de todos los intervinientes, un tono de,  las quejas y los problemas son los mismos y no se llegan a abordar  soluciones hasta que ya es demasiado tarde. La preocupación que latía en la mente de todos si conseguimos salir de la sequía del 2005 a duras penas y había dinero, ahora que no lo hay si avanzamos hacia otra ¿qué va a pasar?.
 Sobre el tema de las herencias de la anterior sequía creo que hemos aprendido a gestionar nuestra agua en periodos de bonanza climática, a gestionar a nivel de sistema integral, los niveles de embalse lo demuestran, y por eso la sensación es que el Júcar no está en sequía, sin embargo los datos climáticos o de lluvias nos indican lo contrario.

1 comentario:

  1. Yo que estuve allí, me emocionó muchísimo la intervención del presidente de la Comunidad de Regantes de Cullera: toda una vida dedicada a la agricultura.

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